“Sólo hay un argumento que puede demostrar algo y eres tú. Si TÚ cambias, te conviertes en un argumento muy vital. Si no cambias, argumentar es inútil; no puedes convencer a nadie. El simple razonamiento nunca convence; sólo tu ser convence. Así que no discutas sobre ello... Si te ha pasado algo, tu ser se convertirá en el argumento. No gastes energía en convencer a nadie. Utiliza toda la energía que tienes en transformarte. Tu transformación ayudará a muchos; tu argumento no puede ayudar a nadie. Una vez que te hayas transformado, la gente empezará a enamorarse de ti. Se volverán receptivos, acogedores; se convertirán en anfitriones. Y todo lo que les digas será recibido como una semilla; lo llevarán en sus corazones. Pero no intentes convencer a nadie; no discutas; no seas intelectual y racional al respecto. Todo el fenómeno es tan absurdo, es tan paradójico. Es paradójico porque al estar conscientemente loco vas más allá de toda locura. Una persona que medita con esta técnica n...