“La cuestión eres tú. Y cuando digo tú, quiero decir tú,
cada individuo, no como grupo, no como sociedad. Cuando quiero decir tú, simplemente
quiero decir tú, el individuo, y el truco de la mente es hacerlo social. La
mente quiere preocuparse por los demás y entonces elude el problema. Puedes
posponer tus propios problemas: es así como has estado desperdiciando tu vida
durante muchas vidas. No la desperdicies más…
No pienses en los demás. Primero resuelve tus problemas,
entonces tendrás la claridad para ayudar también a los demás. Nadie puede
ayudar a no ser que él mismo esté Iluminado”.
Osho, ...Y llovieron flores. Charlas sobre historias zen