"...la inseguridad es parte de la vida y siempre permanecerá. Las personas que creen estar seguras son ilusas; nadie puede estar completamente seguro mientras esté vivo. La única seguridad es la que se tiene en la tumba. ¿Cómo podrías estar seguro cuando están la enfermedad, la muerte, el amigo que fallece, el ser amado que se va para otro lugar? ¿Cómo podría algún ser humano estar seguro? El banco podría fallar, podrían quebrar, podrían quedarse sin empleo, podrían perder la vista, podrían quedar inválidos, o paralíticos. ¿Cómo podrías estar seguro con mil y una cosas que acechan por todas las partes?
La idea misma de alcanzar la seguridad engendra el problema. Yo ayudo a la gente a aprender a disfrutar la inseguridad. No les brindo seguridad. ¿Cómo podría? Nadie puede hacer semejante cosa y tampoco sería bueno. Aunque alguien pudiera hacerlo, no debe hacerse, porque la persona segura está muerta; no puede vivir...
La única seguridad posible está en comenzar a disfrutar la inseguridad. Aunque parece una paradoja, todo lo que es verdad en la vida es paradójico. La verdad es una paradoja. Si amas la inseguridad, ésta desaparecerá. No quiere decir que adquieras seguridad, sino que tan pronto como comiences a disfrutarla, dejará de ser problema; desaparecerán las preocupaciones y la ansiedad. La emoción es incomparable porque siempre está la pregunta de lo que pueda traer el mañana. Y entonces estarás siempre abierto".