“¿Qué decir de los despiertos? ¡Incluso los no despertados son únicos! No
hay nadie como tú en ninguna parte del mundo: nunca ha habido antes y nunca
volverá a existir. Tú eres el único... La existencia no es repetitiva, y es
bueno que no sea repetitiva. Sólo piensa en un mundo donde millones de gautama budas estén
sentados debajo del árbol bodhi: ¡sería muy aburrido!...
Cada individuo es único: la singularidad es un regalo de la
existencia...
Toda la idea es de imitación: ¡Imita! No tienes derecho a
ser tú mismo, tienes que imitar. Sólo puedes ser aceptado si eres otra persona:
Buda, Moisés, Mahoma, Mahavira, Jesús, Kabir, pero no tú mismo...
Todos deben convertirse en rebeldes, no en
imitadores...Nunca puedes disfrutar la vida de otra persona, por hermosa que
sea, no es tu vida. Sólo puedes
disfrutar de ser tú mismo. Un rosal puede ser maravilloso sólo como una rosa.
Si obligas a una rosa a convertirse en caléndula, será muy grave; perderá toda
alegría, toda fragancia...
Nadie necesita ser nadie más. Sólo sé tú mismo. Muestra algo
de respeto a tu vida. Respétate a ti mismo. Ámate a ti mismo, porque a menos
que te respetes a ti mismo, no respetarás a nadie más en el mundo. Si ni
siquiera puedes respetar tu vida, ¿cómo puedes respetar a alguien más?...
Todos tienen que crear su propio sendero. No hay autopista
hacia la verdad, sólo senderos, y tampoco están disponibles; tienes que caminar
y crearlos. Tienes que buscar la verdad, y en tu misma búsqueda creas el
camino...La búsqueda de la verdad es una inmensa aventura; cada momento uno se
encuentra con una gran sorpresa..."
Osho, The
Wild Geese and the Water