“Mi sugerencia es que las personas deberían seguir moviéndose de una disciplina a otra...Te encontrarás volviéndote más y más creativo...
Si quieres fama, olvídate de la creatividad...Siempre que traigas algo nuevo al mundo, seguramente serás rechazado. El mundo nunca perdona a una persona que trae algo nuevo…
Entonces si realmente quieres ser creativo, tendrás que aceptar que no puedes ser famoso, no puedes ser conocido...Entonces disfruta de todo lo que estás haciendo. Si puedes encontrar algunos amigos para disfrutarlo, bien; si no hay nadie para disfrutar, disfrútalo solo. Si lo estás disfrutando, es suficiente. Si te sientes satisfecho con eso, es suficiente…
El verdadero arte significa: si te ayuda a permanecer en silencio, quieto, alegre; si te da una celebración; si te hace bailar, si alguien participa contigo o no es irrelevante; si se convierte en un puente entre tú y la existencia, eso es verdadero arte. Si te absorbe, tan absorto que el ego desaparece, eso es verdadero arte…
Si te alegra hacerlo, si te sientes perdido al hacerlo, si te sientes abrumado de alegría y paz al hacerlo, es un verdadero arte. Y no te preocupes por lo que dicen los críticos. Los críticos no saben nada sobre arte. De hecho, las personas que no pueden convertirse en artistas, se convierten en críticos. Si no puede participar en una carrera, si no puede ser un corredor olímpico, al menos puede pararse al costado del camino y arrojar piedras a otros corredores...Eso es lo que los críticos siguen haciendo. No pueden ser participantes, no pueden crear nada…
Así que no te preocupes por ellos. Lo decisivo es tu sentimiento interior, brillo interior, calor interior…
Si puedes estar en cualquier arte, música, pintura, escultura, danza; si algún arte puede controlar tu ser, esa es la mejor manera de orar, la mejor manera de meditar. Entonces no necesitas ninguna otra meditación. Eso te llevará lentamente, paso a paso, hacia la santidad. Entonces, este es mi criterio: si te lleva a la piedad, es verdadero arte, es auténtico”.
Osho, The Dhammapada: The Way of the Buddha, vol. 10