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La existencia no tiene la obligación de seguir mi plan.

“Mirando hacia atrás, puedes ver todas las etapas desde la semilla hasta la flor, pero si ves la semilla, no podrás predecir lo que va a suceder.

La semilla está completamente cerrada. Tiene potencial, pero no sabemos si la semilla caerá en el suelo correcto, o caerá sobre una piedra y nunca crecerá, o puede ser comida por animales, destruida por niños. Nadie sabe lo que va a suceder en el futuro; el futuro permanece abierto, desconocido, incognoscible.

Y así es como Sannyas ha crecido. Nunca lo he planeado... no de la forma en que un arquitecto planea cómo va a ser el edificio….Una construcción puede ser planeada, pero el crecimiento es la vida. Es una apertura a muchas dimensiones. Qué raíz, qué dimensión tomará, nadie lo sabe.

He funcionado desde esta inocencia continuamente. No soy un hombre que planifica. Confío tanto en la existencia que planificar significa desconfiar. Sé que la existencia me ha ayudado hasta este momento, y nunca he hecho nada. El próximo momento también será atendido. Para mí, esta confianza es la verdadera religión... no creer en Jesucristo o Dios, o creer en la Biblia, o el Corán.

No. Vivir una vida de espontaneidad sin ningún plan, confiar en lo que sea que pase es lo correcto. Y cuando digo cualquier cosa, quiero decir cualquier cosa, porque no tenemos ningún plan, no podemos tener ningún juicio sobre lo que pasa. Si tenemos un plan, entonces hay muchas posibilidades de decepción.

La existencia no tiene la obligación de seguir mi plan. Por eso la gente religiosa ha estado diciendo a lo largo de los siglos: "El hombre propone y Dios dispone". No hay Dios para disponer, hemos dispuesto del mismo Dios, pero si el hombre se propone, está obligado a llegar a un punto en el que habrá decepción.

Nuestra visión es pequeña; la existencia es infinita. Así que cualquier cosa que podamos decidir no tendrá importancia. De hecho, creará todo tipo de obstáculos. Si la existencia se va al sur y planeamos ir al norte, entonces habrá una tensión entre tú y la existencia. Esta es la causa de que tanta gente en el mundo viva en la ansiedad, angustia, tensión, decepción, frustración. La razón es que, en primer lugar, comenzaron a esperar, a desear, a planear. La existencia no tiene la culpa. La existencia no depone sus propuestas. La existencia simplemente sigue su propio camino; y mi experiencia es ir con la existencia. Yo le llamo el "camino de dejar ir".

Así que dondequiera que el río lleve...

Sí, retrospectivamente puedes imaginar que parece haber una planificación, pero nunca ha habido una planificación. Pero han sucedido cosas que deberían dar a cada sannyasins el valor para vivir sin preocuparse por el futuro. Toda mi experiencia lo demuestra.

Simplemente las cosas siguen sucediendo. Permites que sucedan, eso es todo. No lo impidas.

No intentes cambiar la dirección. Relájate. Confiando como un niño pequeño sosteniendo la mano de su padre, sin preocuparse de que la noche esté descendiendo, de que el camino sea largo, de que haya todo tipo de peligro en el camino... animales salvajes, ladrones, asaltantes. No se preocupa, sabe que su padre le está cogiendo la mano.

Mientras el padre está tenso, con gran ansiedad, el niño está disfrutando cada momento a su lado, sin que su ansiedad lo afecte en absoluto”.

Osho, The Last Testament, Volumen 2