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Basta con mirarte: ¡no llevas pantalones!

Sherlock Holmes, ese maestro detective, estaba sentado en su silla favorita fumando su pipa y leyendo un libro cuando oyó que llamaban a la puerta. Era su leal amigo y asistente, el Doctor Watson.


"Ah, buenos días, Watson. ¿No le parece un poco caliente usar su ropa interior de franela roja?"


El doctor Watson se sorprendió por este brillante golpe de lógica deductiva. "Holmes", dijo el Doctor Watson, "¿cómo diablos adivinó que llevaba mi ropa interior de franela roja?"


"Elemental, mi querido Doctor Watson. Olvidó ponerse los pantalones. "


La gente se mueve sin pantalones, sin consciencia de lo que hace, de lo que no hace, de adónde va; y cuando les dices la verdad, piensan que has revelado algo grande, "un gran experimento de lógica deductiva".


Los Budas han estado diciéndote simples verdades. No hay ninguna lógica involucrada en absoluto. Basta con mirarte: ¡no llevas pantalones! Pero sigues creyendo que llevas pantalones.


El hombre es inconsciente, y el hombre no tiene por qué serlo. El hombre puede convertirse en una luz de consciencia. Y sólo cuando eres una luz de consciencia vale la pena vivir tu vida, es tu vida; de lo contrario estás simplemente arrastrándote, de alguna manera manejando, tirando. Es feo, es como un desierto. No has conocido nada que valga la pena saber. No has visto la belleza, no has experimentado el bien, no has sido capaz de tocar nada que sea sagrado...


Lo único que se necesita es despertar…


¿Qué puede hacerte consciente? Viendo el punto de que la sociedad no está interesada en tu felicidad o en tu consciencia, uno se retira de esta sociedad. Y por abandonar no quiero decir que te escapes al Himalaya. Permaneces en él, pero en el fondo ya no estás en él. Eso es sannyas...


Cuidado con lo que haces. Observa cada acto. Desautomatiza cada acto. Mantente constantemente alerta. Caminando, vigila cada paso. Comiendo, observa. Incluso mientras duermes, vigila lo que pasa: lentamente, lentamente el cuerpo se relaja, los miembros se relajan. Mirar, sentir... el frescor de la sábana, la suavidad de la almohada. Sé sensible, éstate atento: entonces lenta, lentamente, la mente se mueve hacia la dimensión del sueño... Observa. Sigue observando, sigue observando tanto como puedas, y un día sucede: te quedas dormido, y sin embargo la observación continúa. Entonces uno aprende a ver los sueños”.


Osho,  El secreto

https://osho-maestro.blogspot.com/