Ir al contenido principal

La vida es una mujer

"Por ejemplo, si alguien te dice: “Cuando voy a nadar al río, es tan hermoso y me siento tan feliz y relajado, flotando en el agua bajo el sol. Me olvido de todas las preocupaciones, me olvido de todas las tensiones, y estoy tan relajado, el mundo no existe. Y me siento tan feliz, me llega un gozo tan profundo con ello”, entonces surge tu avaricia y dices: “Entonces yo también lo probaré”. Así que vas, pero vas muy directamente. Tu mente no está en el nadar, tu mente no está con el río, tu mente no está con el sol, tu mente no está con el viento. Tu mente es como una flecha que va directamente hacia la diana de la felicidad --y te la perderás. Porque la vida es muy tímida. Se esconde de la gente que es agresiva. Se rebela sólo a los que la persuaden de forma muy sutil e indirecta. A la vida hay que persuadirla y seducirla. La vida es una mujer.

No seas agresivo con ella. No puedes violarla. Si tratas de violarla estarás con las manos vacías, no ganarás nada con ello…

Vas al río, pero tu mente está continuamente pensando y anhelando la felicidad. No miras al río, no estás sensible. Eres sólo avaricioso. Entras en el río, pero simplemente te sientes cansado y no relajado. Nadas, pero estás preguntando constantemente: “¿dónde está esa felicidad de la que hablabas?. Veo el sol, veo el río, veo el movimiento de los vientos, ¿pero dónde está esa felicidad de la que hablabas?”.
Esto es ataque directo; nadie puede alcanzar la felicidad de esa forma. Tienes que olvidarte de ti mismo al nadar y olvidarte de que estás allí para alcanzar la felicidad. Olvídate de ti mismo y olvida la avaricia y olvida las metas. Cuando se olvida la meta se alcanza la diana . Puedo parecer paradójico pero no puedo ser otra cosa; no tengo opción, porque es así como es la vida. Olvídate de la diana y la flecha dará en ella; mira la diana, mírala demasiado –y la flecha yerra… No comprendes que la vida es femenina, es realmente una mujer. Tendrás que persuadirla, tendrás que jugar a muchos juegos con ella, indirectos, sutiles. No vayas y preguntes a una mujer directamente: “¿Te gustaría venir a la cama conmigo?”. Ella llamará a la policía.

Sé un poco más poético. Escribe hermosas cartas de amor a la vida… Una pequeña agresión y te la perderás. El amor, la felicidad, la meditación, la verdad, o lo que tú quieras, todo lo que es hermoso sólo puede alcanzarse de una forma sutil.

Osho, Tao Los tres tesoros, Vol. I
http://osho-maestro.blogspot.com/