"Este concepto de Dios como persona ha causado muchos problemas. La mente desearía que fuese una persona, con objeto de poder transferir sobre él toda la responsabilidad, y habiéndole hecho responsable, comenzar a cargarlo con todas las pequeñeces. Si una persona encuentra trabajo, le da gracias a Dios; si lo pierde , se enfurece con él. Si a alguien le sale una verruga, sospecha que es obra de Dios; si se cura, se lo agradece. Nunca nos damos cuenta de cómo estamos utilizando a Dios; ni siquiera nos paramos a pensar cuán egocéntrica es nuestra actitud cuando asumimos que Dios ha de preocuparse hasta de nuestras verrugas...
La ventaja de considerar a Dios como persona es que podemos atribuirle las responsabilidades.
Pero un buscador mantiene la responsabilidad sobre sí. De hecho, ser un buscador significa no hacer responsable de nada a nadie excepto a uno mismo. Si hay tristeza en mi vida, soy responsable, y si hay felicidad también soy responsable. Si soy tranquilo, soy yo el responsable de ello; si no tengo sosiego, yo me lo he trabajado. No hay otro responsable más que yo por cualquier estado en el que me halle. Si me caigo y me rompo una pierna, es por mi culpa, y no puedo echarle la culpa a la gravedad. Si esta es la actitud de su mente, habrá comprendido correctamente...".
Osho, En busca de la trascendencia
La ventaja de considerar a Dios como persona es que podemos atribuirle las responsabilidades.
Pero un buscador mantiene la responsabilidad sobre sí. De hecho, ser un buscador significa no hacer responsable de nada a nadie excepto a uno mismo. Si hay tristeza en mi vida, soy responsable, y si hay felicidad también soy responsable. Si soy tranquilo, soy yo el responsable de ello; si no tengo sosiego, yo me lo he trabajado. No hay otro responsable más que yo por cualquier estado en el que me halle. Si me caigo y me rompo una pierna, es por mi culpa, y no puedo echarle la culpa a la gravedad. Si esta es la actitud de su mente, habrá comprendido correctamente...".
Osho, En busca de la trascendencia