Ir al contenido principal

Un hombre que vive cada momento con tal intensidad que la vida se ha vuelto un paraíso, que la propia vida se ha vuelto divina, no necesita adorar estatuas, escrituras muertas, ideologías necias, supersticiones estúpidas

"El hombre que vive totalmente no bebe alcohol ni toma ninguna otra clase de droga... Vivir totalmente es tan gozoso que no quieres destruir tu gozo bebiendo alcohol. El alcohol lo necesita la gente miserable, la gente cargada de problemas, la gente que de alguna forma quiere olvidar sus problemas, sus ansiedades, al menos durante unas horas...

El hombre que vive plenamente pierde la ambición, porque es tan feliz en este preciso instante que no puede concebir que algo mejor sea posible.... La locura común de la mente humana  --el deseo de tener más y más-- se debe a que no estás viviendo plenamente. Siempre hay una brecha; falta algo. Sabes que las cosas podrían haber sido mejor. Todas las ambiciones son el resultado de vivir parcialmente, y aparece entonces todo el juego social: la gente quiere enriquecerse, ser famosa, ser un político, llegar a presidente o a primer ministro...

Un hombre que vive cada momento con tal intensidad que la vida se ha vuelto un paraíso, que la propia vida se ha vuelto divina, no necesita adorar estatuas, escrituras muertas, ideologías necias, supersticiones estúpidas".

Osho, De la medicación a la meditación
http://osho-maestro.blogspot.com/